viernes, noviembre 08, 2013

La de las palabras huecas. La de Cepción

Ella, como casi todas las de allí, es bonita. Las de Cepción antes, en los tiempos en que las chicas esperaban a que los chicos les llevaran al baile, eran feas, pero ahora no, ahora que las mujeres tienen la desfachatez de no desearme espontáneamente, ahora están buenas, tienen talento y los pechos rebosantes de promesas y buenos augurios.

El caldo de la sopa es el resultado de la lenta y contumaz cocción de los alimentos esenciales, y ella sería como un caldo si no fuera de Cepción ante todo. Pero ella, por ser tan de Cepción, no tiene tiempo para ser caldo y es más gallina blanca, gallina fugaz y trepidante, cloqueando como una gallina mágica, por lo que podríamos decir que ella, como buena de Cepción adora esfumarse sin pensar en nada más.

Ella canta. Canta al sol a la luna y el viento, porque dice ser natural como el sol, la luna y el viento. Pero también son naturales las berzas, la mierda de cerda y la nariz de la lombriz y no van diciéndolo por ahí, como si fueran portuguesas, por lo que no debemos dar demasiada importancia a la canción que canta esta mujercita de pies traviesos y mente insolente, pero es que ella es toda vacuidad, ella es pura de Cepción. No hay nadie más de su pueblo que ella.

Ella a veces parece otra ella, la Mento de Cirlo, la típica mema que no sabe tocar la flauta, pero insiste una y otra vez con Twinkle, twinkle, little star, y a mí me parece completamente insustancial, totalmente irresponsable, absolutamente egoexistencial, como un conejito mirando melancólicamente las zapatillas de correr, Adidas Tampico, de la señora tortuga.

Ella sólo dice ecos. Ella sólo aflora en reflujos. Parece que sabe, pero no sabe a nada, fast food, pim-pam-pum. Tiene mucho cuento, y no tiene relato. Es una tormenta desatada de cháchara, pero ya sabes, es la lluvia incesante y calabóbica, el orballo tenaz de Cocacola en el cerebro, ella es la de las palabras huecas, la de Cepción.

La indiscutible y neta decepción.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gusta

Wolffo dijo...

Intrigao me tienes, Anonimous, intrigao de verdad.

Clementine dijo...

A mí también me gusta esto que te ha salido aquí. Porque es original, sorprendente, creativo, muy creativo... No sé, tiene magia.
Sí, me ha gustado. Mucho.
Un beso, great Wolffo.

Wolffo dijo...

¡Clemsie...!
Qué cariñosa, muchas gracias.

Montones de besos, de esos de cine.

Mal dijo...

Esta vez no he entendido ná de ná.. Se me estarán encogiendo las neorunas?

Wolffo dijo...

Mal, Mal, Mal... eso es que estás desentrenada, porque siempre he sido un libro abierto para ti.
Es sólo un post sobre la decepción, un desahogo abstracto. Alguien me decepcionó y esto es una reflexión (de todo a cien) sobre el frío que se siente, al menos temporalmente, cuando la decepción entra en tu vida.
Y nada más.